Privacy International ha publicado los resultados de una encuesta que revela que casi el 60% de las aplicaciones más populares de Android transmiten información personal a Facebook. Las aplicaciones como Tripadvisor, Skyscanner o Kayak comparten datos que incluyen no solo la identificación de Android del usuario, sino también, en algunos casos, la información proporcionada en los formularios. En el caso de Skyscanner o Kayak, podría ser, por ejemplo, búsquedas sobre el destino y los vuelos en los que realizó la consulta.

Privacy International indica que de las 34 aplicaciones de Android estudiadas, al menos 20 transmiten datos personales a Facebook automáticamente cuando la aplicación se abre por primera vez.

Los datos intercambiados de este modo son ciertamente anónimos, pero el proceso es ilegal. Al menos en Europa, donde el Reglamento general de protección de datos prohíbe a las empresas intercambiar datos de usuarios sin su consentimiento. Si esta primera filtración puede ser escandalosa, el Financial Times nos recuerda que Facebook no es el único responsable de esta situación.

El RGPD está diseñado para proteger la información personal de los usuarios para que no sea identificable. En la práctica, tal medida es difícil de aplicar. Incluso una empresa con medios tan importantes que Facebook ha tenido problemas para implementar esta función de forma correcta y rápida. Miles de aplicaciones dependen del kit de desarrollador de Facebook y todos los desarrolladores externos no integran correctamente las nuevas características, esta "demora de inicio" parecía inevitable.

Los directivos de Skyscanner dicen que no sabían que estaban enviando información a Facebook. Por su parte, la red social destaca la próxima llegada de herramientas dedicadas a la administración de datos personales que permitirán, por ejemplo, que Clear History aún tenga un control más detallado sobre la información compartida.

Cuando Facebook tiene un nuevo registro, ya tiene una gran cantidad de datos sobre su nuevo suscriptor. La práctica está fundamentalmente en desacuerdo con el RGPD, que ha estado vigente desde el 25 de mayo de 2018, y requiere el consentimiento explícito del usuario para transmitir sus datos. Para tales hechos, la regulación europea prevé multas de hasta el 4% de la facturación global en el caso de una empresa.

Facebook puede ser considerado como uno de los responsables de este intercambio de datos, ya que es a través de su kit de desarrollo de software que se transmiten los datos. Y se tardó casi un mes después de la entrada en vigor del RGPD para configurarse de modo que se pueda proponer al usuario una solicitud de consentimiento.

Los datos transmitidos a Facebook no son peligrosos, sin duda. Esto es, según la organización no gubernamental, el nombre de la aplicación utilizada, la frecuencia de apertura de la aplicación, el modelo y el nombre del teléfono inteligente, así como la ID de Google. Pero una vez que se recopilan todos los datos, Facebook "puede hacerse una imagen virtual detallada e íntima de las actividades, intereses, comportamientos y rutinas de las personas", afirman los investigadores de la ONG, que son conscientes de que "algunos pueden revelar Datos de categorías especiales, incluida información sobre la salud o la religión de las personas".