Hace 30 años la distribuidora de videojuegos ERBE Software dio un golpe de efecto bajando el precio de los videojuegos un 40%. Hemos recuperado un artículo de la revista Amstrad Semanal (1987) en el cual explican los motivos de aquella decisión.

Erbe Software ha anunciado la noticia del año: todos sus productos, las últimas novedades en juegos que ellos distribuyan para todos los ordenadores, bajan radicalmente de precio. Por «radicalmente», Erbe entiende 875 ptas, para los juegos en cinta y 2.250 para los de disco.

Ante una declaración de esta magnitud, sin duda los lectores se preguntaran muchas cosas.

Por ejemplo: a que se debe esta medida que aparentemente lleva a los fabricantes y distribuidores legales de soft a perder dinero.

Bien. Erbe Software no es una institución antropomórfica, sino una empresa comercial, pero han sido los primeros en tomar una medida que va a beneficiar enormemente al consumidor, porque a partir de ahora un juego legal de máxima actualidad va a estar al alcance de todo el mundo. Esto, en principio, incrementara las ventas en gran medida, pero los que se han lanzado a dar el paso deben asumir el riesgo que conlleva un recorte tan drástico en los márgenes de beneficio de forma inmediata.

Por otra parte, el mercado de los juegos para ordenador está experimentando un fenómeno muy común: saturación. Las casas de soft han descubierto que vendían muchos juegos. Por tanto, lancemos más, y rápido. Esta política conlleva a la larga una oferta mucho mayor, y el comprador se dispersa. La vida media de un producto se acorta día a día y, si bien se venden más programas que nunca, el número de unidades «colocadas» por título no para de disminuir.

Ahora bien, lo costos de producción de cada programa no se recortan en forma acorde con este proceso. Súmele a esto el cáncer de la piratería y se llegara a una triste conclusión: el mundo del soft de juegos corre grave peligro de extinción.

La política de Erbe interna dar al traste con este callejón sin salida, permitiendo al comprador acceder a un número mucho mayor de títulos por el mismo dinero, además de asestar un golpe mortífero a la piratería ilegal de programas. Por un precio mas que razonable, uno posee una copia legal del juego, con instrucciones en condiciones y una asistencia posventa garantizada por gente seria, no por el típico pirata del Rastro que se lava las manos a la primera de cambio.

Ahora la gente puede o comprar más juegos de lo mejor o ser mucho mas selectiva que antes: solo adquirir programas realmente buenos, porque ya no son caros.

Por otra parte, nos gustaría matizar un aspecto muy importante, y muy negativo. La piratería: si no se la ataja a tiempo, destruye la industria del software (caso de Italia). En un sentido inmediato, nada hay que beneficie más al comprador que la piratería. En efecto, un programa última novedad a cuarenta duros no admite discusión. Sin embargo, si las casas de soft legales no venden, se arruinan, y dejan de fabricar juegos porque no pueden pagar a sus programadores ni cubrir costos ni ganar dinero.

Hasta ahora los piratas y los usuarios tenían una excusa muy razonable para «trabajar juntos»: el soft de juegos era desproporcionadamente caro. De acuerdo. Y tal vez los «legales» sean los responsables de ello por su desmedida ansia de beneficios a carta plazo y dinero fácil. Pero ahora ya no es así: en España, va a ser mucho más barato que en todos los países de Europa, Inglaterra incluida. Esta iniciativa, como comentábamos antes, conlleva un riesgo, y si todos y cada uno de los implicados en el mundo de los videojuegos no la apoyamos con todas nuestras fuerzas, a la larga solo quedarán piratas, que venden pero que no fabrican. Señores: nos quedaríamos sin soft.

Evidentemente, lo primero que hemos podido comprobar al pedir la opinión de las otras casas de software, tanto creadores como distribuidores, fue la sorpresa — más bien el estupor— que ha causado la noticia del «bajón» de precios por parte de Erbe Software. No es de extrañar. Una bajada de un cuarenta y «pico» por ciento mas o menos, en los juegos versión disco, y algo más del sesenta por ciento en la versión de cinta, no podía causar otra reacción. Pero pasemos a ver las opiniones de las casas de software con las que hablamos:

DINAMIC. Esta firma española, exponente al igual que otras del buen software que se está haciendo en nuestro país, opina que la política de bajar precios les parece interesante, ya que con ello se conseguirá apurar a los piratas y, por otra parte, no menos importante, el precio de los juegos les parece caro.

DRO SOFT. Opinan que ellos no se verán excesivamente afectados, en lo que se refiere a juegos del sector medio-bajo, ya que los juegos de la «Serie Plata» que ellos distribuyen solo cuestan 750 ptas. En lo referente a la gama alta. Dro Soft cree que hay que justificar los altos precios, con un nivel de acabado alto, entendiéndose por esto, buenas traducciones de instrucciones, calidad en la presentación y papel de las mismas, así como la caja en que el juego es puesto a la venta.

MADE IN SPAIN. Esta buena casa de software español piensa que hay que mantener el precio de los programas, debido a la necesidad de pagar honestamente a los buenos programadores que están surgiendo en nuestro país, cosa que seria difícil de lograr con una bajada de este nivel. A su juicio, la situación de saturación del mercado se debe a lo que ellos definen como «monopolio de Erbe».

OPERA SOFT. La gente de esta joven casa de software, también española, ven esta bajada con expectación y piensan observar el mercado para ver su reacción, tomando a continuación las medidas oportunas. Si el mercado reacciona favorablemente a la bajada, o sea, si se produce un mayor número de ventas, será el momento de adherirse a esta medida. De todas formas, piensan que para conservar los márgenes actuales habría que vender tres veces más.

SERMA. Cuando les preguntamos que les parecía la política de Erbe, su contestación fue que se sentían realmente sorprendidos; no entendían como Erbe iba a soportar esta linea de precios y, lo que es más, no entendían que margen les iba a quedar. Desde luego, y según los cálculos que nos hicieron, parece imposible esta medida, pero que nosotros sepamos, Erbe no cuenta con el mago Merlin entre sus filas... Según ellos, desde que Erbe anuncio esta medida las ventas se han paralizado, ya que la gente esta esperando los nuevos precios.

ZAFIRO. Esta firma, que además de dedicarse a la distribución de discos y cintas de audio, se dedica asimismo a la venta de software, se halla en un compas de espera para observar y estudiar las reacciones del público «adicto» a los programas de juegos para los micros.

Esta es la opinión de las casas de software, tanto creadores como distribuidores, acerca de la bajada por parte de Erbe Software de sus productos, que si bien no dudamos afecte de manera muy positiva al consumidor, vemos como es acogida entre las demás casas de software con sorpresa, escepticismo y dudas acerca de su resultado.

Cuando el software español triunfaba en Europa